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Una declaración de la renta bien hecha es una de las formas más efectivas de ahorrar pues, si no aprovechamos todos los beneficios fiscales que tenemos a nuestra disposición, estaremos pagando de más y la diferencia no son simples céntimos. Te contamos cuáles son los seguros que puedes desgravar en la declaración de la renta.

Seguros de vida y de hogar pueden desgravar

Sin más preámbulos: los principales seguros que puedes desgravar en la declaración de la renta son los de vida y los seguros de hogar que están vinculados a la hipoteca, aunque hay algunos otros de los que también te hablaremos. Si aún no has realizado tu declaración de 2017, aún estás a tiempo de incluirlos.

Si tu seguro del hogar o de vida tiene como beneficiario a la entidad financiera con la que has contratado tu hipoteca, puedes desgravarte lo abonado por este seguro porque la legislación lo permite. No así si la propiedad ya está pagada y es tuya o eres el beneficiario del seguro.

Si tienes una hipoteca contratada antes de que finalizara el 2012 tienes derecho a deducción porque a partir del 1 de enero de 2013 se dio por finalizada la desgravación por la adquisición de una vivienda habitual. Si eres uno de los afortunados puedes desgravarte hasta un máximo de 9.040 euros de los que Hacienda podrá reducir hasta el 15%.
Un ejemplo práctico: si en cuotas de hipoteca has pagado en total al año 7.000 euros, para llegar a los 9.040€ nos quedarían 2.040 euros lo que significa que aún tienes margen para incluir lo que has gastado en tus seguros para deducirlos también hasta llegar al importe total mencionado.

El 15% de 9.040€ son 1.356€ y esto es justamente lo que puedes ahorrarte desgravando tus seguros en la declaración de la renta si lo haces de forma conjunta con la deducción por la adquisición de vivienda habitual.

Seguro de enfermedad para autónomos también desgrava

Hablando de seguros que se pueden desgravar en la declaración de la renta, no podemos pasar por alto el seguro de enfermedad para autónomos, un producto que también tiene un beneficio fiscal.

Los seguros de enfermedad no tienen mucho que ver con los de salud ya que los primeros tienen como objetivo que haya una indemnización en caso de que pasemos por un periodo de convalecencia que nos impida trabajar y que, por tanto, implique una pérdida de dinero.

Por su parte, los seguros de enfermedad grave, una modalidad de los seguros de enfermedad, también se pueden deducir. Como su propio nombre indica se trata de un producto que lo que pretende es ofrecernos protección respecto a enfermedades de carácter grave como el cáncer o distintas cardiopatías.

Si el autónomo tiene contratados seguros de enfermedad para proteger a su cónyuge y a los hijos menores de 25 años que convivan con él también puede desgravarse hasta un máximo de 500 euros anuales de lo que paga.

Ahora que ya tienes toda la información, ya puedes hacer correctamente tu declaración de la renta. Recuerda que Hacienda ofrece teléfonos gratuitos para orientarte, pero si no estás seguro de hacerlo por este medio, también un gestor como los de Seguros Nogal puede serte de gran ayuda.