ventajas fiscales seguro enfermedad autonomos

Actualmente, y a raíz de la grave crisis económica que sufrimos, así como del aumento en la demanda de profesionales en el sector digital, hay una mayor cantidad de empleados autónomos. Una de las cosas que estos deben tener en cuenta es que pueden beneficiarse de deducir fiscalmente sus seguros de enfermedad.

¿En qué se diferencian un seguro de enfermedad y un seguro de salud?

Lo primero que debemos tomar en consideración es que no es lo mismo un seguro de enfermedad que un seguro de salud corriente. La diferencia radica en que en este último no existen indemnizaciones.

El seguro de enfermedad está pensado para que exista una indemnización en el caso de que pasemos por un periodo de convalecencia que nos impida trabajar o que tengamos que estar ingresados en un hospital con el mismo resultado.

El objetivo es tener una protección económica en el caso de que no podamos responder a nuestras actividades profesionales durante un tiempo determinado, además de la cobertura de ciertos gastos como los médicos o los relacionados con los medicamentos. En el seguro de salud corriente no existen indemnizaciones, solo se nos cubren los tratamientos médicos que necesitemos.

¿Qué son los seguros de enfermedad grave?

Existe una modalidad de seguros de enfermedad llamada seguro de enfermedad grave que también se puede deducir. El objetivo de este seguro es protegernos de las consecuencias económicas que deriven de una enfermedad grave que puede ser, por ejemplo, enfermedades como el cáncer o cardiopatías.

Si trabajamos para una empresa y esta se hace cargo de nuestro seguro de enfermedad grave, puede desgravarse el seguro en el impuesto de sociedades siempre y cuando las personas que estén recogidas en el seguro, aparte del trabajador, sea su cónyuge y los hijos que convivan en el mismo domicilio que el asegurado.

Los autónomos también pueden deducirse los gastos relacionados con el pago de los seguros de enfermedad (grave o no) en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas o IRPF siempre que se esté tributando en régimen de estimación directa. En el caso de que se use el sistema de módulos, los rendimientos de trabajo se van a determinar valorando la diferencia entre ingresos y gastos del ejercicio.

Los autónomos pueden desgravarse igualmente los gastos relacionados con el seguro de enfermedad de su cónyuge y de los hijos menores de 25 años que convivan con él en el domicilio hasta un importe máximo de 500 euros anuales.

¿Qué limitaciones existen al desgravar el seguro de enfermedad?

Hay que tener en cuenta que solo podemos desgravar un seguro de enfermedad si lo contratamos como autónomos y que la cuantía máxima a desgravar es de 500€ por persona que esté incluida en la póliza. Esto implica que en la misma no solo podemos estar nosotros, sino también nuestro cónyuge y los hijos menores de 25 años que convivan con nosotros.

¿Quieres más información sobre los seguros de enfermedad? Ponte en contacto con tu correduría de seguros de confianza.