Seguros ‘low cost’: cuando lo barato sale caro
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La facilidad para buscar presupuestos por internet convierte en una práctica habitual la búsqueda de seguros y, en concreto, la comparación entre compañías low cost. En apariencia, los precios son inmejorables, pero en cuestión de protección es mejor no dejarse llevar por las gangas, que llevan muchas limitaciones escondidas en la letra pequeña.
Un seguro que se niega a pagar el siniestro
Desde hace varios años, distintos sectores denuncian la forma como este tipo de aseguradoras abordan los gastos derivados de los partes de sus clientes. Entre otros, los talleres de mecánica denuncian estas ventas tan agresivas, que solo traen perjuicio para su bolsillo. El motivo es que estas compañías aprietan a los talleres para que estos bajen el precio aunque esto conlleve una pérdida de calidad: el tiempo dedicado a cada reparación es menor e incluso tienen que optar, a petición de estas compañías, por piezas no oficiales o de segunda mano.
Ventajas que no siempre lo son
La comodidad a la hora de buscar seguros es una de las ventajas que ofrecen estas compañías low cost. Y, aparentemente, el precio también lo es. Pero indicamos que solo en apariencia, porque si has hecho alguna vez la prueba, a medida que vas añadiendo cambios en los campos habilitados para coberturas en función de tus necesidades, el precio tiende a incrementarse drásticamente, alcanzando la prima del resto de aseguradoras y en muchos de los casos sobrepasándolas.
El caso del seguro de coche
En el seguro de coche, que es el producto estrella, las tácticas más habituales son:
- Franquicias altas. Es posible que detrás de un todo riesgo haya una franquicia alta, de modo que cuando, por ejemplo, acudes al taller para la reparación del vehículo te puedes encontrar con que tengas que pagar mucho más de lo esperado.
- Subida en el segundo año. En el momento del vencimiento de la póliza, ésta ya no es tan económica. En este caso solo hay dos alternativas: pagar más o volver al inicio y buscar otra compañía.
- Talleres concertados. Es habitual que estas compañías tengan su propia red de talleres, que tendrás que aceptar para poder estar cubierto por el seguro.
- Partes por accidentes. Puede ocurrir que en caso de accidente, aunque la culpabilidad no sea del asegurado, la compañía lo ponga en el expediente, haciendo constar que ha tenido un siniestro.
Junto con el seguro de coche, también hay que prestar especial atención con el seguro de responsabilidad civil, ya que en caso de siniestro grave puede que las indemnizaciones más altas no están cubiertas y las cuantías en estos casos son muy elevadas. Mira los aspectos clave a analizar en un seguros de responsabilidad civil.
La táctica de estas compañías es clara: bajan los precios para conseguir un volumen importante de cliente y una vez que lo han conseguido, suben el precio para que los clientes menos rentables —los que dan más partes— se den de baja.
Conclusión
A modo de conclusión, como sucede en otros sectores, no te dejes llevar únicamente por el impulso del precio y busca un seguro que se adapte a tus necesidades porque la diferencia del precio no es tan significativa como en un primer momento quieren aparentar. Toma la mano de una correduría de seguros de confianza como Nogal y déjate aconsejar para encontrar el mejor seguro para ti y los tuyos, siempre dentro de las mejores y más fiables aseguradoras del mercado.