coberturas imprescindibles seguro coche

A la hora de contratar un seguro de coche lo primero que nos viene a la cabeza es la elección del tipo de contrato: a todo riesgo, con franquicia, sin franquicia, a terceros… Es una decisión a priori sencilla en el sentido de que si el vehículo es nuevo no nos lo pensamos dos veces a la hora de contratar un seguro a todo riesgo por el miedo a tener algún golpe o un robo. Mientras, si el coche ya tiene unos añitos optamos por un seguro más económico, ya que sabemos que por mucho riesgo que se tenga contratado la indemnización a recibir dependerá de los años de matriculación, entre otros aspectos.

Una vez tomada esta decisión, el siguiente dilema a resolver es la elección de las coberturas de la póliza. No es nada fácil determinar cuáles son las coberturas más adecuadas en función de los riesgos que asumamos en el día a día. Para ayudarte en la elección, enumeramos aquellas coberturas que son imprescindibles.

Coberturas esenciales en los seguros de coche

Estas son las coberturas imprescindibles que debe cubrir cualquier seguro de coche:

  • Responsabilidad civil. La responsabilidad civil no solo es imprescindible en un seguro de coches, sino prácticamente en todos los seguros cuya actividad implique un riesgo. Por ejemplo, en el caso de los autónomos, de esta manera estarán cubiertos ante alguna negligencia que pudieran cometer en su actividad. La responsabilidad civil es la cobertura básica que se tiene que contratar, aún cuando no se haga uso del vehículo. Esta cobertura cubre los desperfectos que se puedan cometer en terceros, por ejemplo, en el caso de que el turismo eche a arder aparcado en un garaje (incluso en el propio). Es una cobertura obligatoria para todos los vehículos a motor, ya que cubre los daños que pueda causar el conductor a terceras personas (daños personales) o el vehículo (daños materiales).
  • Asistencia de viaje. Esta es otra de las coberturas más importantes porque es precisamente en los viajes donde pueden ocurrir accidentes o imprevistos que requieran de intervención. Respecto a la asistencia en viajes es habitual que prácticamente todas las compañías lo contemplen, pero es conveniente analizarla con detenimiento. Para elegir adecuadamente, hay que tener en cuenta todos estos aspectos:
    • Lugar del siniestro: es un factor importante a tener en cuenta porque te puede ocurrir que tengas una avería que precise de servicio de grúa en una zona que no está cubierta por el seguro, bien porque te has excedido en los kilómetros, región (asistencia en territorio español o en países de la Unión Europea) o estás circulando por una vía rural.
    • Traslados. Nos referimos tanto al traslado del vehículo (algunas compañías ofrecen la posibilidad de llevar el turismo al taller más cercano, otras a talleres oficiales y otras incluso permiten que el asegurado elija su taller de confianza). En cuanto al traslado de personas, según la cobertura el seguro se hará cargo del traslado de los viajeros.
    • Servicio 24 horas, 365 días del año. Cuando suceden los imprevistos es cuando realmente nos damos cuenta de la importancia de contar con un buen seguro. Los hay que tienen asistencia los siete días de la semana, las 24 horas. Esto es un alivio porque sabes que estés donde estés hay una persona al otro lado del teléfono escuchándote.
    • Vehículo de repuesto. Este es otro de los puntos interesantes, sobre todo cuando el vehículo se convierte en tu modo de transporte para acudir a trabajar. De esta manera tendrás garantizado un turismo de sustitución, que minimizará las consecuencias del incidente.
    • Alojamientos. Para los conductores que viajan mucho es conveniente echarle un vistazo a este servicio, para que te encuentres donde te encuentres la compañía te garantice un lugar donde permanecer.
    • Alcance del accidente. Vrifica que la póliza cubre todo tipo de accidentes, con independencia de su magnitud. Quizá un pinchazo no se considera grave pero puede hacer que te quedes en la carretera sin asistencia.
  • Seguro del conductor. Por su importancia, la mayoría de las compañías aseguradoras incluyen esta cobertura hasta en los seguros a terceros. En la carretera nadie está libre de errores, así que lo mejor se incluir en la póliza esta cobertura que te protege ante una negligencia por tu parte.  
  • Robo del vehículo. Esta cobertura tiene más sentido para los coches nuevos, con extras y que son atractivos para los ‘cacos’. Respecto a esta cobertura hay que leer bien la letra pequeña para conocer al detalle todos los elementos que se incluyen en el robo: extras, ruedas, pertenencias, etc.
  • Incendios del vehículo. Es difícil que este tipo de coberturas se lleguen a usar, pero no es imposible; sobre todo ante la oleada de gamberros que se dedican sobre todo los fines de semana a quemar contenedores, afectando a los turismos que están aparcados en las inmediaciones. Si vives en una zona conflictiva, es una cobertura a tener en cuenta.
  • Reparación o sustitución de lunas. Los cristales del turismo se rompen con más frecuencia de lo que creemos. Es suficiente con una china que caiga de un camión que circula delante o con una tormenta de granizo. En esta cobertura hay que tener en cuenta si cubre solo la reparación o también la sustitución.
  • Defensa jurídica. Es una cobertura útil, aunque sea por ganar tranquilidad al pensar que vamos a contar con la presencia de un abogado en caso de accidente. Nunca se sabe cuándo se podrá necesitar y si en ese momento contamos con recursos económicos. Este es ese tipo de servicios que se contrata por tranquilidad. Por las posibilidades de que ante un siniestro se requieran los servicios de un profesional experto en derecho, la mayoría de las compañías aseguradoras lo incluyen en la póliza. Lo que varía es el presupuesto destinado a esta defensa jurídica. Este servicio contempla tanto la defensa del asegurado por daños causados como la reclamación a terceros por los daños que estos hayan causado al asegurado.
  • Reclamación de multas y retirada del permiso de conducir. Ambos tienen que ver con malas conductas por parte del asegurado. Es un servicio que puede resultar de interés para aquellos que tienen tendencia a cometer imprudencias que puedan tener repercusión en forma de multa o de retirada del carné de conducir.
  • Daños propios. Esta suele ser la cobertura que distingue a los seguros a todo riesgo, ya que cubre todos aquellos desperfectos ocasionados en el vehículo del asegurado, ya sea culpa de terceros, fenómenos meteorológicos o incidentes ocasionados por el asegurado (colisión del turismo, vuelco, etc.).

La elección de una buena póliza de coche es esencial y es una cuestión prioritaria. Por ello, lo mejor es dejarse aconsejar por una correduría de seguros como Nogal, que es independiente de las aseguradoras y siempre proponen las coberturas que mejor se adaptan a cada necesidad. 

Coberturas curiosas que puede incluir un seguro de coche

Además de las coberturas imprescindibles que acabamos de ver, hay otras coberturas que son muy curiosas y se pueden incluir en los seguros de coche: pérdida de llaves, atropellar a un animal salvaje o robos en un semáforo, entre otras. Con un buen seguro de coche puedes proteger a tu vehículo de casi cualquier cosa que imagines.