Diferencias entre vidrio y cristal. ¿Cómo reciclarlos?
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Reciclar es sumamente importante para el medio ambiente. Pero no basta con hacerlo, hay que hacerlo bien. Un error que cometemos muchas personas es confundir el vidrio y el cristal, lo que hace que no reciclemos correctamente. En este artículo queremos arrojar luz sobre las diferencias entre ambos materiales para ayudarte a hacer la mejor gestión del reciclaje en tu hogar.
Conoce la diferencia entre el vidrio y el cristal
El cristal es un sólido que está formado con óxido de plomo y es el resultado de la cristalización de algunos gases a causa de la propia naturaleza. El vidrio, por su parte, es totalmente fabricado y se elabora con distintas materias primas (principalmente sílice, sosa y caliza) que están presentes y se disponen de manera aleatoria. Esta es la primera diferencia destacable del vidrio y el cristal.
Otra está en su estructura molecular. Como el cristal es estable y posee una estructura atómica regular, presenta formas más definidas y simétricas. Por el contrario, las del vidrio son más caprichosas debido a su estructura irregular y aleatoria de distintas materias primas.
La tercera y más importante de las diferencias entre el cristal y el vidrio es que este último es 100% reciclable. El cristal, no puede reciclarse junto con el vidrio porque el óxido de plomo que contiene requiere una temperatura para llegar a la fundición mucho mayor que la que exige el vidrio. Por eso es que los envases u objetos de cristal deben ir en los contenedores grises y el vidrio en los verdes.
Reciclar vidrio y cristal correctamente
Si los objetos de vidrio o cristal que vamos a desechar son muy grandes como ventanas o espejos, es necesario que los llevemos al punto limpio. Lo mismo sucede con otros materiales como la porcelana, etc.
Como curiosidad, un dato: ¿sabes que hay vasos de cristal y de vidrio? Sin embargo, la mayoría de los que usamos son de vidrio y, por tanto, reciclables. Ahora bien, imagina que se te ha roto un vaso y vas a tirarlo. ¿Dónde? Primero sería necesario saber cuál es el tipo de material del que está hecho. Hay una forma para que puedas averiguarlo. Por cierto puedes protegerte ante una rotura accidental del vidrio o cristal de tus ventanas, puertas o mesas con un buen seguro de hogar. Todo depende de las coberturas que contrates.
En el caso de una copa, si quieres saber el material del que está hecho, golpea el borde con el dedo. Si el sonido que resulta es un ping corto, podremos saber que se trata de una copa de vidrio. Si el sonido es largo y armonioso, entonces estaremos ante una copa de cristal.
Otro detalle que podemos tener en cuenta es que, generalmente, los vasos y copas de cristal suelen ser más pesados que los de vidrio por contener plomo.
En general, las botellas, tarros, frascos, fuentes, platos y vasos (transparentes y sobre todo los de colores) son de vidrio y, por tanto, reciclables en el contenedor verde
Lo más tedioso del reciclaje suele ser tener muchos cubos en casa. Por eso también queremos mencionar que existen unos sistemas muy avanzados y cómodos para que el reciclaje en casa sea más fácil. Por ejemplo, existen cubos compactos con colores diferenciados para detectar con mayor facilidad dónde debemos depositar el residuo. Ten en cuenta que existen muchos trucos para hacer tu hogar sostenible.
Para quienes vayan a reformar su cocina o comprar una nueva, también existen cajoneras especiales para el reciclaje que lo hacen muy limpio y cómodo. En definitiva, reciclar no tiene por qué ser un impedimento para tener una bonita casa o trabajar de manera cómoda en la cocina. Además, el vidrio puede reciclarse infinitas veces sin perder ninguna de sus propiedades en botellas, tarros, frascos, jarrones… Es un gesto simple que es vital para el medio ambiente. ¡Súmate!